domingo, 29 de septiembre de 2013

Se acerca otra fecha crítica

En breve es el cumpleaños del pequeño y mucho me temo que aunque lleve todo el mes sin venir a ver a sus hijos, eso no se lo va a saltar.

Lo digo desde la más profunda de las preocupaciones porque no se cómo van a reaccionar los niños cuando le vean de nuevo. Me preocupa volver a tirar por tierra cierta estabilidad ¿O tal vez lo asuman con naturalidad?

Mi terapeuta recomienda visitas breves y a poder ser, conmigo presente. En casa no le quiero e irme con él al parque, me da yuyu.

Ya no sé qué es mejor, que le vean o que no. Porque lo cierto es que al principio fue duro ver la cara de pena con la que el pequeño llamaba a su padre, como queriendo decir quiero verle mamá. Y lo que me dice el mayor, mamá dile a papá que venga a buscarnos.

Por mi parte creo haber cumplido cuando le he repetido hasta en tres ocasiones que cuando quiera ver o hablar con los niños, que me lo diga. Hace dos semanas que no hablamos de nada y sinceramente no me apetece un pimiento verle, cuanto menos le veo, menos quiero verle e imagino que los niños se adaptan a su realidad y en mi esfuerzo de cubrir las carencias que les vayan apareciendo, ellos tienen una vida normal y feliz.

Aunque tal vez se líe la manta a la cabeza y ni si quiera haga intento alguno por verlos, ni en el día en que uno de ellos cumple añitos. Me sorprendería, pero llegados a este punto, me espero cualquier cosa...

2 comentarios:

  1. Ya t echaba de menos...! Un besito y fuerza q lo llevas muy bien!!

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  2. Después de todo lo que nos has contado, a mí tampoco me sorprendería. Espero que pase lo que pase, ese día vaya todo de perlas y lo paséis lo mejor posible.
    Ánimo y un abrazo.

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